EN SU SIGNIFICADO ORIGINAL, TOMADO DE SUS RAÍCES GRIEGAS (GÊ: TIERRA, BIO: VIDA, LOGOS: ESTUDIOS), LA GEOBIOLOGÍA SE REFIERE A TODAS LAS DISCIPLINAS QUE ESTUDIAN LA INFLUENCIA DE UN ENTORNO EN LOS ORGANISMOS VIVOS QUE LO COMPONEN.
EN SU PRÁCTICA OCCIDENTAL MODERNA, LA GEOBIOLOGÍA SE DIVIDE ESENCIALMENTE EN DOS ACTIVIDADES PRINCIPALES.
LA GEOBIOLOGÍA SAGRADA, QUE CONSISTE EN ESTUDIAR EL NIVEL VIBRATORIO Y ENERGÉTICO DE LOS LUGARES DE CULTO ANTIGUOS E INCLUSO DE LOS MÁS ANTIGUOS.
LA GEOBIOLOGÍA, COMO MEDICINA DEL HÁBITAT, SE OCUPA DE LA RELACIÓN ENTRE UN ENTORNO VITAL, UN EDIFICIO, UN MODO DE VIDA Y LOS ORGANISMOS VIVOS QUE LO OCUPAN, YA SEAN HUMANOS, ANIMALES U ORGÁNICOS. ESTE ESTUDIO SE BASA, ENTRE OTRAS COSAS, EN LA MEDICIÓN DE ONDAS Y CAMPOS ELECTROMAGNÉTICOS.
LA GEOBIOLOGÍA Y EL HÁBITAT, ¿QUÉ REGLAS OBSERVAR?
La geobiología del hábitat se considera como la medicina del hábitat. Estudia la influencia del entorno vital en el equilibrio biológico del ser humano, los animales y las plantas. Este enfoque global integra el impacto del entorno biológico, geológico y técnico, gracias, por ejemplo, a la utilización de dispositivos de medición de la contaminación electromagnética generada por las fuentes Wifi, los medidores Linky o las antenas de relevo.
La geobiología del hábitat también integra las técnicas ancestrales de la geobiología radiestésica, con el objetivo de identificar las fuentes y venas de agua por debajo de un hábitat, y poder influir en su equilibrio energético. Los expertos en naturaleza y geobiología también son capaces de identificar las fallas, los nodos de las redes etéricas.
GEOBIOLOGÍA Y SALUD, ¿CUÁLES SON LAS SEÑALES DE ALARMA?
Según Hipócrates, el padre de la medicina, en su «Tratado sobre los aires, las aguas y los lugares», todo buen médico debe empezar por observar cuidadosamente el entorno y las condiciones de vida de sus pacientes.
La geobiología pretende optimizar el crecimiento, la prosperidad, el bienestar, la salud y el desarrollo de todos los organismos vivos.
Cuando un entorno está energéticamente desequilibrado, las consecuencias para la salud de los individuos que lo habitan pueden ser extremadamente desagradables, incluso peligrosas. En general, los síntomas que se experimentan con más frecuencia van desde la aparición de dolor y fatiga crónicos, reumatismo, un notable aumento del estrés y la irritabilidad, una especie de inmovilidad en los proyectos, una espiral psicológica negativa, incluso depresión. Más concretamente, una cama mal colocada, por ejemplo, puede provocar agotamiento al despertar, arritmias cardíacas, dolores nocturnos, insomnio, enuresis, enfermedades persistentes, calambres musculares o enfermedades graves.
En concreto, los métodos de geobiología y salud en el hogar son complementarios a las soluciones mom para luchar contra la contaminación electromagnética, con correctores ambientales o de redes eléctricas domésticas.