Este periodo de vuelta a las aulas es la oportunidad perfecta para hacer un balance dela influencia de las ondas escalares en los niños y adolescentes. Dado que cada vez están más expuestos a las radiaciones electromagnéticas a una edad más temprana, con el uso cada vez más precoz de los teléfonos móviles y otras tabletas, está claro por quées tan importante protegerlos de estas radiaciones perjudiciales para su salud. Sobre todo porque sus cuerpos, que todavía se están desarrollando, son más vulnerables que los de los adultos, y este uso temprano significa que nuestros niños y adolescentes tienen más probabilidades de estar expuestos a estas ondas a lo largo de su vida.

El bienestar y las funciones cognitivas en cuestión

Esta cuestión del impacto de las radiaciones magnéticas en los niños y adolescentes preocupa a las más altas autoridades sanitarias. En julio de 2016, la Agencia Nacional de Seguridad Alimentaria, Medioambiental y Salud Laboral (Anses) de Francia publicó un informe sobre la exposición de los niños a las radiofrecuencias y sus posibles efectos en la salud. Si bien esta opinión de los expertos deja un margen de incertidumbre en cuanto a las consecuencias sobre el comportamiento, las funciones auditivas, el desarrollo, el sistema reproductor masculino y femenino, el sistema inmunitario y la toxicidad sistémica, o incluso sobre los efectos cancerígenos o teratogénicos, en cambio, revela claramente el impacto negativo sobre el bienestar y las funciones cognitivas (memoria, funciones ejecutivas, atención) de los más jóvenes.

Una anatomía en desarrollo más sensible

El ANSES también subraya que, debido a sus especificidades morfológicas y anatómicas, en particular su pequeño tamaño, así como a las características específicas de algunos de sus tejidos, los niños y adolescentes están mucho más expuestos a los efectos nocivos de estas radiaciones electromagnéticas que los adultos. Los estudios sobre la exposición de la cabeza muestran que las zonas cerebrales más cercanas al cráneo están más afectadas..

Escalares a favor de un desarrollo saludable

Por lo tanto, las recomendaciones de los padres sobre el uso moderado de los teléfonos móviles y otros dispositivos electromagnéticos resultan muy adecuadas. Como la destinada a animar a los más jóvenes a utilizar un kit de manos libres para limitar la exposición de la cabeza a las ondas negativas. Sin embargo,para limitar al máximo este impacto y, sobre todo, para transformar estos campos negativos en radiaciones positivas y beneficiosas para la salud, nada mejor que recurrir a las ondas escalares. Las soluciones mom® están aquí para asegurar el crecimiento y desarrollo saludables de los niños y adolescentes, invirtiendo la polaridad de las ondas negativas en campos vitales protectores. Invite a sus niños y adolescentes a llevar un ®colgante energético mom®, para protegerse directamente, o coloque el ,corrector ambiental mom® en la habitación donde utilizan sus tabletas y teléfonos Smartphone. La radiación del corrector del entorno les protegerá del campo electromagnético en un perímetro multidireccional de 100 metros.